AMOR Y AMISTAD

Hola mis lectores, este domingo 14 de febrero se celebra en mi país el día del amor y la amistad, una fecha importante para celebrar en pareja, familia y/o amigos.

Y hemos escuchado infinidad de veces también decir que no deberíamos tener solo un día para festejar, que a diario deberíamos de tener un gesto o recordar no solo con hechos sino también con palabras a esas personas que son importantes para nuestras vidas. En parte es verdad, pero está fecha también tiene lo suyo, y no solo comprarle cosas a esa personita especial, sino que festejar algo tan grande como el amor.

El amor, es algo inmenso de comprender, muchos autores no lo han podido descifrar del todo, o es solamente una introducción a lo que significa. 

En esa clase de amor no hay temor, porque el amor perfecto expulsa todo temor. Si tenemos miedo es por temor al castigo, y esto muestra que no hemos experimentado plenamente el perfecto amor de Dios.
Nos amamos unos a otros, porque él nos amó primero.
1 Juan 4:18-19

El amor es paciente y bondadoso. El amor no es celoso ni fanfarrón ni orgulloso ni ofensivo. No exige que las cosas se hagan a su manera. No se irrita ni lleva un registro de las ofensas recibidas.
No se alegra de la injusticia sino que se alegra cuando la verdad triunfa.
El amor nunca se da por vencido, jamás pierde la fe, siempre tiene esperanzas y se mantiene firme en toda circunstancia.
1 Corintios 13:4-7


Con estas palabras tan importantes es complicado alcanzar ese tipo de amor, aunque pidamos día con día alcanzarlo, hasta ir perfeccionando nuestros sentimientos. Hasta lograr ese perfecto amor de Dios para otros.

Hay que dejarnos querer con este amor del Padre, el que no lleva la cuenta de las ofensas, el que todo lo perdona, que es bondadoso y paciente y que nos podemos acercar sin ningún temor al rechazo, pues dice su Palabra que aunque padre y madre nos abandonen, Dios siempre estará para nosotros, se entristece junto con nosotros y nuestras victorias también son de Él. Su perfecto amor es inagotable, es infinito, es un Padre cariñoso, y debes de sentir su abrazo, en cada momento de bendición es el que está con nosotros. Debemos de pasar más tiempo con Él e invitarlo a nuestra mesa.

Lo mayor es el amor porque sin este nada somos, debemos de llenarnos primero de su amor y lo mismo transmitir a todos los que tenemos alrededor.

Y algo también importante que decir el amor es una decisión que tomamos, Dios nos manda a amar al prójimo como a nosotros mismos. Y transmite su amor a otros por medio de nosotros también.






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